Que bonito es lo bonito.

Ayer fui a ver Crónicas de Narnia.
Que pelicula tan bonita, tenía mucho tiempo que no me divertía tantísimo con una peli de aventuras.

Y además las animaciones, padrísimos los castores, fueron mis favoritos, no se la pueden perder. Se reirán muchísimo, y se emocionarán, y se asustarán, y mucho más.

Es la película que si se lleva un 10.

Y una analogía que me gustó mucho, muy ad hoc para la época.
Aslan es el león legítimo rey de Narnia, y uno de los hermanos, (el mas estupido de todos, de hecho), es un traidor, y de acuerdo a las leyes mágicas, por derecho le pertenece a la Witch, y debe morir sacrificado en una mesa de piedra.
Aslan se ofrece a cambio del monito, y es sacrificado voluntariamente, siendo inocente, a fin de redimir al hijo de Adán.
Pues bien, la tradición popular situa la navidad por estas fechas (mañana especificamente), y celebra el nacimiento de Jesucristo, bíblicamente conocido como "El Leon de la tribu de Judá", Aslan significa León en turco, y fue sacrificado, siendo inocente, por nuestras transgresiones.

Y a la muerte de Aslan, la mesa de piedra se rompe, tal como el velo que separaba el lugar santo del santísimo en el templo antiguo, y es el simbolismo que a partir de ese momento, tenemos libre acceso a la presencia Divina, sin ningun mediador de por medio (sin pedradas para nadie, sales?)
Aslan resucita, al igual que JC, y trae consigo un nuevo nacimiento de la tierra.

Quiero decirles público querido, que no celebro navidad, ni cenas ni nada. Sin embargo, si celebro el acto del sacrificio perfecto, por el cual, ya no somos mas creación, sino hijos de Dios.

Y esta película tiene esta analogía, que me parece muy bella.

No la pierdan, sales?