En esta semana fue el cumple de mi sobrinita de 5 años.
Entre las cositas que le regalé estaba un cd de Francisco Gavilondo Soler (cri cri), que creo que me hizo más feliz a mi que a ella, jaja.
Tonces escribo este post bajo el tenor del "Tlacuache"...... cargando un tambache, por todas las calles de la gran ciudad..... papeles que vendan, peródicos viejos, tiliches chamuscados y trevejos cuatrapeados....
Comadres chismosas, cotorras latosas,y viejas regañonas pa meter en mi costal.....
Que levante la mano a quien cri cri no le alegró la infancia.
Cuando no había fulanos (as) por las cuales rasgarse las medias.
Ni vecinas amargosas que dieran lata.
Cuando el frío se quitaba al pegarte a la falda de tu mamá.
Y el miedo se evaporaba al abrazarte a las piernas de tu papá.
Cuando andar en bicicleta sin rueditas era EL acontecimiento del año.
Cuando el tiempo se medía en dulces y golosinas en vez de quincenas.
Cuando no haber hecho la tarea era el problema mas grande del mundo (chin, ese si lo sigo teniendo, jaja).
Bueno gente, ya volví. Fui a pasar el fin de semana lejos de aquí (no tan lejotototes pues), y llego con ganas de moverme al compás de Ché, araña.
2 comentarios:
Jajajaja, pues debo decirte que esa canción del Tlacuache me aterraba. Me daba miedo. Don Gabilondo le ponía una voz medio espectral. A mi nunca me gustó Cri Cri, en esos tiempos escuchaba Ob la di-Ob la da y eso si me licaba.
Saludois hasta Querétaro
Me encanta que te leas tan de buen humor; cuidate mucho, aki seguimos y besos y abrazos desde Aca
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