Estamos a 2 días del día de muertos y mis manos estan saturadas de olor de cempazúchitl.
Parte de mis "labores" es el montaje del altar para la oficina.
En honor al fundador de la empresa. (qepd).
El día de hoy 2 nuevas fotografías tienen cabida dentro de éste altar.
2 compañeros de trabajo.
2 personas.
2 jóvenes.
2 corazones.
2 suicidios.
Y pensar que nunca tuvimos tiempo de charlar. Mucho menos de preocuparnos por sus problemas.
Ni tiempo de preguntar ¿Como estas?.
Pero hoy si tengo tiempo de poner incienso, una cruz de sal y tequila para honrarlo.
Que curiosa es la vida. Quizá el día de hoy les presté mucha más atención que los años que compartimos juntos en la oficina.
Que confuso sentimiento de hipocrecía.
Que tristeza que embarga nuestros corazones.
Sin pensar siquiera, me concentro colgando flores, prendiendo velas, pegando papel picado de miles de colores. Y no volteo a ver a los que detrás de mi tienen una tristeza infinita en sus corazones.
Ahora gasto el tiempo montando altares.
Y seguimos sin preocuparnos por los vivos.